Thomas Bach fue reelegido oficialmente como presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), tras haberse presentado sin candidatos opositores en las elecciones, durante la inauguración de la 137ª sesión del COI en Atenas.
El abogado alemán asumió como presidente del COI en 2013, cuando sucedió a Jacques Rogge en una elección presidencial que tuvo lugar en Buenos Aires, horas después de consagrar a Tokio como nueva sede olímpica para 2020. Aquella vez, Bach había recibido el respaldo de 49 miembros del organismo, sobre un total de 93 voluntades, que se repartieron entre 6 candidatos presidenciales.
Pero ocho años después, la realidad es bien distinta. Como único candidato en la votación de este miércoles, una situación ya anunciada meses atrás al no presentarse ninguna oposición dentro del centenar de dirigentes que integran el COI, Bach recibió 93 votos a favor, un voto en contra y cuatro abstenciones, mediante un sufragio secreto desarrollado por primera vez de manera virtual.
“Muchas gracias, desde lo más profundo de mi corazón, por este abrumador voto de confianza“, fueron las palabras de Thomas Bach apenas conocía el resultado de la votación. “Para mí esto es aún más abrumador considerando tantas reformas y decisiones difíciles que tuvimos que tomar y que nos afectaron a todos.”
“Quería ser el presidente de todos ustedes, y eso continúa en mi segundo y último mandato”, agregó Bach. Como lo impone la Carta Olímpica que regula la actividad del COI, sólo es posible extender un primer período de 8 años como presidente con un segundo mandato de 4 años, que técnicamente comenzará tras los Juegos Olímpicos de Tokio, es decir, el 8 de agosto de este año.
Campeón olímpico de esgrima en Montreal 1976, como integrante del equipo de florete de Alemania Occidental, Bach se desempeñó como presidente de la Confederación Deportiva Olímpica Alemana durante siete años, entre 2006-2013, antes de convertirse en presidente del COI.
Durante la sesión virtual de este miércoles, la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, dio la bienvenida a la reelección de Bach, elogió sus contribuciones al movimiento olímpico y destacó especialmente los esfuerzos del dirigente alemán para sostener los Juegos Olímpicos pospuestos hace casi un año.
A propósito de Tokio 2020+1, el propio Thomas Bach reconoció que sigue en estudio la posibilidad de que sólo se permita la presencia de público local en los estadios y escenarios deportivos de los Juegos Olímpicos, como extrema medida de seguridad sanitaria para el cuidado de los deportistas y de la comunidad japonesa en general. “Tendremos que resolverlo tan pronto como podamos“, recalcó.
Bach también propuso agregar el término “juntos” al eslogan olímpico, que históricamente reza “Más rápido, más alto, más fuerte“, del original “Citius, Altius, Fortius“, y celebró el apoyo hacia los distintos proyectos encarados estos años por la llamada “Agenda 2020” que flexibiliza el proceso de las candidaturas olímpicas para las ciudades que quieran ser sedes de los Juegos.