A los 33 años, la chilena Kristel Kobrich consiguió algo inédito para una mujer en la historia de la natación sudamericana. Gracias a sus 16:17.92 registrados en Des Moines, Estados Unidos, en la final de los 1500 metros libre de las TYR Pro Swim Series, logró la marca A clasificatoria para Tokio 2020, y allí nadará por quinta vez en un Juego Olímpico, un privilegio que sólo tuvo el brasileño Rogerio Romero en la rama masculina (entre Seúl 1988 y Atenas 2004).
El tiempo de Kobrich, medallista plateada en Iowa, estuvo 14 segundos por debajo del tope de 16:32.04 que exige la FINA para Tokio 2020, edición estreno para los 1500 metros que hasta Río 2016 sólo tenía competencia masculina. De hecho, las chinas que dominaron los otros dos puestos del podio también nadaron con marcas clasificatorias: Wang Jianjiahe ganó la prueba en 15:46.69 y Li Bingjie se quedó con el bronce en 16:19.71.
A comienzos de este año, en el Campeonato de verano de Argentina, su país de adopción desde que se mudó hace 15 años a Córdoba para entrenarse bajo las órdenes del argentino Daniel Garimaldi, Kobrich había confesado que tenía dos grandes objetivos para esta temporada: “Ahora que los 1500 libre están en los Juegos Olímpicos y también fueron confirmados para los Juegos Panamericanos, mi carrera se orienta a esa prueba” confesaba la oriunda de Santiago.
Entre Atenas 2004 y Río 2016, la chilena estuvo presente en los cuatro últimos Juegos Olímpicos, con sus mejores resultados en Londres 2012, donde terminó 14ª tanto en los 400 como en los 800 metros libre. En Beijing 2008, además, compitió en los 10 km de aguas abiertas, aunque no pudo culminar la carrera.
En los Mundiales de natación sí pudo aprovechar su mejor performance en los 1500 metros, a tal punto que estuvo muy cerca del podio en 2009 y 2011, con sendos 4° puestos. Y en 2013 mejoró su propio récord sudamericano que hoy sigue vigente con 15:54.30. “Estuve en la final de los últimos seis Mundiales, este año también me gustaría repetir esa experiencia. Además, buscaré la clasificación a Tokio 2020, quizás mi último Juego Olímpico”, anticipaba Kobrich hace poco más de un mes.
Desde que el pasado 1° de marzo se abrió el período de clasificación olímpica, la marca mínima de Kobrich en los 1500 libre la convierte también en la primera nadadora sudamericana con pasaje a Tokio 2020. Inclusive en su país se trata de la segunda deportista de Chile que consigue un boleto para los próximos Juegos Olímpicos, tras una clasificación previa en tiro deportivo.