http://www.nbcnews.com/dateline/video/michael-phelps-training-for-rio-684550211721
A 4 meses de los Juegos Olímpicos de Río 2016, Michael Phelps está con una mentalidad muy diferente a la que tuvo antes de los Juegos de Londres 2012. Anoche fue entrevistado por Matt Lauer en Dateline NBC y hablaron sobre su rehabilitación, actitud y su cambio de mentalidad para encarar los próximos Juegos Olímpicos.
Detrás del gran éxito de los anteriores Juegos, Phelps era una persona muy diferente interiormente de lo que uno esperaría, tal como le dijo a Lauer: “fui sin auto confianza, sin amor propio. Pensaba de mi como un nadador más, sólo eso”. Describe el periodo negativo por el que pasó, en dónde él odiaba tanto la natación como la vida misma.
Explicó su apatía hacia los Juegos Olímpicos del 2012 y la natación en general, algo que hizo que su relación con su entrenador, Bob Bowman, sea tóxica. Admite que se faltaba a las prácticas y a veces por días enteros, llegando a peleas con su entrenados, y odiando la natación: “No me importaba, realmente no me importaba”. Bowman le dijo a Dateline que el deseaba que Phelps renuncie en ese momento: “Mo quería que él pase por esto y pensaba que iba a terminar muy mal”.
Poco después de los Juegos de Londres, Phelps estaba más hundido, y fue arrestado por conducir bajo los efectos del alcohol. Explicó que la noche en la que fue arrestado, algo hizo clic en su mente, se dio cuenta que algo debía cambiar en su vida y que ya no quería seguir viviendo así. “Estaba en el lugar más bajo en el que había estado, honestamente, en un punto sentía que no quería ver otro día, sentía que debía acabar”.
Habló de lo que estaba sintiendo en ese momento, y cómo el ser arrestado abrió sus ojos y cambió su actitud hacia la vida: “había perdido el 100%, sacando a mucha gente fuera de mi vida, gente a quien quería y necesitaba en ella, estaba corriendo y escapando de lo que sea que estaba corriendo… sentía que caía en una espiral. Pienso que era más una señal que cualquier otra cosa, que debía tomar el control, de lo que fuera. Veo hacia atrás a esa noche y todo ocurrió por una razón. Conduje de esa manera, pero nunca utilizo esa ruta”. Poco después de esa noche, él se registró en un centro de rehabilitación y comenzó la terapia.
Explicó sus motivos para registrarse en el centro de rehabilitación: “Me registré porque pienso que estaba en un punto de mi vida en el cual necesitaba cambiar y necesitaba resolver las cosas”. Phelps dice que, durante su rehabilitación, pudo sobrellevar su creencia de que no le importaba a su padre: “Una de las grandes cosas que finalmente pude sobrellevar fue el sentimiento de ser evitado por mi padre, de ser abandonado por mi padre. Era un chico que siempre quiso una familia, por más que nuestros padres no estuvieran juntos, aún quería una madre y un padre, y no lo había tenido por tanto tiempo”.
EL padre de Phelps, quien se divorció de su madre en 1994, no ha tenido mucho contacto con el nadador en los últimos 20 años. A pesar de esto, Michael lo invitó a visitarlo en rehabilitación y su adre aceptó la invitación, sobre el tema Phelps dijo: “Esto demostró que él aún quería ser parte de mi vida, así que el sentimiento que tenía de ser evitado y de abandono, ¿era una equivocación?”
Phelps describe, fuera del hecho que entró en rehabilitación y muestra sus verdaderas emociones: “No sé si era como si estuviese con miedo de mostrar quien soy o qué era, y finalmente fue como si, qué importa, no me voy a esconder detrás de nada nunca más, soy quien soy, y si no te gusta, realmente no es mi asunto y no es mi problema”.
Cuando se le preguntó cuál fue el cambio que hizo que Phelps sea más abierto con sus dificultades, él dijo: “Porque estoy cómodo con ello, estoy más tranquilo, estoy más relajado”.